jueves, 19 de diciembre de 2013

ALLENDE: FIN DE LA ALTERNANCIA

Llegó inexorablemente a su fin la primera administración panista en la ciudad de Allende, Coahuila; pues con su cuarto y último informe de gobierno, Sergio Lozano ofreció los resultados que su administración  consiguió, sobre todo en la última etapa de su gobierno. Ante ello, no se dejaron esperar, sobre todo en las redes sociales, los comentarios de personas que manifestaron su postura y sentir sobre el desempeño de Sergio. Comentarios que sin duda fueron en su mayoría peyorativos, pero ciertamente infundados y con poco conocimiento de la gestión local.
Para empezar, resulta muy difícil, aún para los que nos dedicamos al análisis político, poder emitir una crítica o análisis sobre la gestión de un gobierno de alternancia, sobre todo si no hay continuidad en términos de permanencia en el poder, ante ello, es preciso señalar que el PAN se sentó a gobernar sobre estructuras fincadas y seriamente enquistadas de estilo priísta de gobernar. Por ello no se puede hacer un balance sobre si fue en términos coloquiales “bueno” o “malo” el trabajo del PAN, pues muy seguramente se enfrento a inercias internas reacias al cambio. Por otro lado, la ciudad de Allende, antes del PAN era una ciudad subdesarrollada, es decir, con mediocres administraciones priístas que no generaron crecimiento ni desarrollo en ninguna vertiente, por ello no entiendo cómo se puede juzgar un “mal trabajo” sobre uno que no  generó de ninguna manera gobernanza y calidad de vida para la sociedad. Así mismo, la tarea de gobernar siempre es difícil, pues la administración pública siempre se enfrenta al tema de los recursos escasos, ante ello, las políticas públicas nos señalan la dificultad que se presenta para poder decidir qué colonia pavimentar si sólo se cuenta con recursos para trabajar en una sola, por ello siempre habrá personas descontentas que aduzcan que nada se hizo durante determinada administración.
Desde mi punto de vista como politólogo, me parece que la administración fue igual de mediocre que todas las priístas que le antecedieron, pues no generó prosperidad a través del crecimiento cuantitativo ni del desarrollo cualitativo de la ciudad y sociedad en general. Sin embargo, como ciudadano, reconozco que la colonia Ignacio Allende en la cual radico fue iluminada en el tramo que conduce a la carretera 57, la cual, desde que llegué a esta ciudad se mantenía en penumbras, así mismo, la obra cultural en la plaza de armas fue algo positivo. Con altas y bajas, la administración de Sergio Lozano pasará a la historia por haber generado la primera alternancia política en el municipio, y, lamentablemente, no pudimos ser testigos de la consolidación del PAN mediante la permanencia en la presidencia debido a que emularon el sucio juego priísta y les costó la alcaldía.

Mientras no existan organismos ciudadanos encargados de establecer parámetros de medición de gestión pública, difícilmente podremos emitir un juicio sobre el desempeño de administraciones que vayan y vengan independientemente del los colores de su partido. Por lo pronto la alternancia llegó a su fin y en su estadía, me parece, dejo más expectativas que satisfacciones.