domingo, 17 de junio de 2012


POLUCIÓN

La recolección de basura es una de las tareas principales de cualquier administración pública independientemente de la tendencia política que gobierne, pues dicho servicio público genera las condiciones que permiten tanto contar con una imagen urbana apropiada, así como evitar la propagación de enfermedades infecciosas producto de la acumulación de residuos de diversa y variada procedencia.
De ahí que para que el servicio sea óptimo se deben cumplir con algunas condiciones tanto institucionales como técnicas para poder prestar dicho servicio con eficacia y eficiencia: Contar con unidades en perfecto estado para que realicen la recolección periódica y sin dilaciones, colocar contenedores con su respectiva clasificación para con ello contribuir a la limpieza en las diversas colonias, contar con un relleno sanitario en donde depositar todos los desechos de manera segura y sin generar riesgos para la salud de los ciudadanos, así como algunas otras especificaciones técnicas en aspectos del manejo de la basura que deben ser tomados en cuenta.
Este es el supuesto que debe privar en este servicio, lamentablemente, para las autoridades del municipio de Allende, Coahuila, dichos supuestos no aparecen por ningún lado cuando de la prestación de este (in) servicio hablamos. Transportes anacrónicos y contaminantes, falta de seriedad en las rutas y tiempos de recolección de las unidades que recogen la basura. Pues una semana pasan determinados días y nadie sabe con certeza si la semana siguiente serán los mismos días o habrá que tener la basura dos días antes en la calle ante la falta de seriedad de las autoridades de ecología, con el consiguiente mal aspecto que ello genera y la contaminación que provocan estos desechos al aire libre y a merced de los canes callejeros que gustosamente se den un festín desparramando la basura a su merced.
Y de relleno sanitario ni hablar, la basura se sigue depositando al aire libre y a escasos metros de dos colonias de dicha localidad. Y todavía peor, cuando la aglomeración es marcadamente considerable, simplemente arrojan un cerillo encendido para que las llamas consuman la basura que autoridades incompetentes no pueden procesar debidamente. Pues fueron tres días seguidos en que amanecía completamente nublado en la colonia Ignacio Allende debido a la inmensa y gruesa nube de humo provocada por dichos incendios. No está por demás mencionar el fétido olor que provoco y los daños a la salud que ésta particular manera de tratar la basura en Allende genera en el organismo de quienes lo respiran.
Esa es la manera en que el gobierno de Sergio Lozano presta el servicio de recolección y trata de basura en Allende. De ahí que el resultado es pésimo, pernicioso y hasta vergonzoso. Por lo tanto si no pueden con el servicio concesiónenlo; o si de plano no pueden, cambien de director de ecología o ya de plano de alcalde.