jueves, 7 de julio de 2011

CORRUPTELAS

Nuevamente un caso de tráfico de influencias, corrupción y nepotismo vuelve a la escena pública derivado de la guerra de dimes y diretes protagonizada por el ex director del ISSSTE, Miguel Ángel Yunes y la líder vitalicia del SNTE, Elba Esther Gordillo.
Detalles tan aberrantes y preocupantes dignas de una novela de autoría de Nicolás Maquiavelo ponen de manifiesto negociaciones en 2006 entre el entonces candidato panista Felipe Calderón y la perniciosa lideresa magisterial Esther Gordillo.
Negociaciones que según afirmaciones de los involucrados derivaron en la designación de los titulares del ISSSTE, LOTENAL y todavía más preocupante, la Secretaría Ejecutiva del Consejo de Seguridad Nacional a favor de personas propuestas por la poderosa maestra.
De ese tamaño la factura cobrada por Elba Esther a Felipe Calderón por su apoyo en 2006 que llevaron a este último a la presidencia de la república hace cinco años.
No es la primera vez que casos de corrupción tan deplorables salen a la luz pública, numerosas veces han acontecido y lo han hecho con tanta frecuencia que ya parecen no lesionar en lo absoluto a la sociedad y a nuestro sistema político; son acontecimientos que por su periodicidad se han vuelto tan “naturales” que sólo sirven para generar morbo y acrecentar el desprecio civil hacia la clase política, pero sin que dicho desprecio trascienda la palabra y se transforme en acciones civiles dirigidas a tratar de erradicar el mal.
No lesiona tampoco el que la acusación del ex candidato al gobierno de Veracruz afirme que la maestra le exigía 20 millones de pesos mensuales extraídos de las arcas del ISSSTE para poder mantener al adefesio que supone la franquicia del PANAL.
Ni tampoco que una vez que Yunes tomo posesión en el ISSSTE Gordillo le proporcionó una lista de personas para que ocuparan cargos estratégicos dentro de la estructura del ISSSTE.
Nada de esto conmueve a nuestra vapuleada sociedad; sin embargo, lo más grave sería que las autoridades como la Secretaria de la Función Pública, la Auditoria Superior de la Federación y el propio Instituto Federal Electoral no hicieran nada al respecto. Su pasividad sería dañina para nuestro país.
El problema, es que se acercan nuevamente elecciones presidenciales en 2012, la maestra ya confecciono la alianza con Enrique Peña Nieto, derivado de ello tiemblo al tratar de imaginar que negociaciones tan oscuras y perniciosas están detrás de dichos acuerdos con fecha cada vez más próxima.
Acuerdos seguramente cargados de corrupción, nepotismo, tráfico de influencias y jugosas negociaciones en detrimento de todos los mexicanos y en beneficio de los mismos de siempre.

CARRO COMPLETO
Como lo vaticine en su momento; el PRI se llevó carro completo en la elección del 3 de Julio; no había posibilidad para el voto dividido; mucho menos para un gobierno yuxtapuesto. Coahuila sigue siendo bastión priísta.